"¡chicos! me da gusto verlos" Entre tal multitud parecía sorprendente la facilidad con la que Gomi encontró a sus compañeros. "Lamento no venir con ustedes, pero debíamos hacer los preparativos". "No es problema, gomi" Shikuro se dio cuenta que su mirada estaba fija en el hermoso traje de Gomi, tenia bordado un cielo nocturno con estrellas y una pequeña imagen del halo solar a los costados, adornos brillantes que lo recorrían (y aquí entre nos, un escote mortal que Shikuro notaria como todo un fanservice). Rápidamente, desvió la mirada hacia la festividad, ocultando un poco el rojo de su rostro. "a todo esto, ¿Como pudieron hacer todo esto en un día?" Preguntó Miruk con incredulidad. "todas ayudamos y trabajamos juntas" Gomi dijo sonriendo. "Oh y además Crystal-chan puso algo de esfuerzo extra" apuntó su mano a una multitud de chicas exactamente iguales levantando carpas por todos los jardines de la escuela "Oh, cierto. Kage bunshin" Shikuro recordó.
Los clones desaparecieron, y crystal, en forma normal, regreso con el grupo de chicas que estaba en la entrada, cuando un reflejo, o mero instinto la hizo voltear y lanzar un puñetazo. No estaba errónea al ver su puño incrustándose en el rostro de Peugeon, mandándolo a volar y dejándolo en el piso con los ojos en espiral.
"Peugeon! ¿Estás bien? ¿Que fue eso?"
"Trajes....chicas...mejor parte del festival" Peugeon murmuraba atontado, pero sonriente en el suelo.
"Ni siquiera lo sueñes, pervertido" Crystal respondió fríamente dando la espalda.
Rápidamente, Peugeon se puso de pie "que ruda eres, crystal-san. Malinterpretas todo"
"¡Calla! Seguramente sigues a las chicas a sus casas y te regodeas olfateando la ropa interior que les robas" Crystal dijo con gran seguridad "¿Pero qué clase de enfermo cree que soy?" Peugeon se lo preguntaba, pasmado"
"En fin. Novata, te dejo con tu equipo. ¡Disfruten el festival!" Una sonrisa cálida invadió su rostro, sorprendiendo con aquel cambio de humor.
En el interior del colegio, las ornamentaciones hechas por las chicas eran muchas más, dándole una belleza inigualable a los pasillos. No cruzaban muchos estudiantes, pero al llegar encontraron una multitud eufórica, como si estuviese pasando algo.
"¡Vamos! No sean cobardes"
"¡Queremos un espectáculo digno del festival!"
Los chicos se acercaron mas y vieron el origen de la discusión.
"Es él" recordó Shikuro el rostro de Saiken, quien junto con su equipo: Seike, y Blackrose estaban sentados en un banco recargado en el muro de la habitación.
"Te lo he dicho mil veces Keno, no tengo ningún interés ni motivo para pelear contigo." La voz de Saiken parecía calmada, pero firme
"Para mí que eres un jodido cobarde, o simplemente que todos esos novatos te vean como 'el mejor' ya se te subió a la cabeza"
"Acepta de una vez, este tipo comenzó a irritarme" Blackrose hablo con su frio y usual tono de voz.
"Ah, ¿Que ni en el primer día del festival podemos estar fuera de esta situación?"Seike mostro su frustración en su habla.
Los clones desaparecieron, y crystal, en forma normal, regreso con el grupo de chicas que estaba en la entrada, cuando un reflejo, o mero instinto la hizo voltear y lanzar un puñetazo. No estaba errónea al ver su puño incrustándose en el rostro de Peugeon, mandándolo a volar y dejándolo en el piso con los ojos en espiral.
"Peugeon! ¿Estás bien? ¿Que fue eso?"
"Trajes....chicas...mejor parte del festival" Peugeon murmuraba atontado, pero sonriente en el suelo.
"Ni siquiera lo sueñes, pervertido" Crystal respondió fríamente dando la espalda.
Rápidamente, Peugeon se puso de pie "que ruda eres, crystal-san. Malinterpretas todo"
"¡Calla! Seguramente sigues a las chicas a sus casas y te regodeas olfateando la ropa interior que les robas" Crystal dijo con gran seguridad "¿Pero qué clase de enfermo cree que soy?" Peugeon se lo preguntaba, pasmado"
"En fin. Novata, te dejo con tu equipo. ¡Disfruten el festival!" Una sonrisa cálida invadió su rostro, sorprendiendo con aquel cambio de humor.
En el interior del colegio, las ornamentaciones hechas por las chicas eran muchas más, dándole una belleza inigualable a los pasillos. No cruzaban muchos estudiantes, pero al llegar encontraron una multitud eufórica, como si estuviese pasando algo.
"¡Vamos! No sean cobardes"
"¡Queremos un espectáculo digno del festival!"
Los chicos se acercaron mas y vieron el origen de la discusión.
"Es él" recordó Shikuro el rostro de Saiken, quien junto con su equipo: Seike, y Blackrose estaban sentados en un banco recargado en el muro de la habitación.
"Te lo he dicho mil veces Keno, no tengo ningún interés ni motivo para pelear contigo." La voz de Saiken parecía calmada, pero firme
"Para mí que eres un jodido cobarde, o simplemente que todos esos novatos te vean como 'el mejor' ya se te subió a la cabeza"
"Acepta de una vez, este tipo comenzó a irritarme" Blackrose hablo con su frio y usual tono de voz.
"Ah, ¿Que ni en el primer día del festival podemos estar fuera de esta situación?"Seike mostro su frustración en su habla.
“No lo motiven, no es no. Mi respuesta final Keno. ¡Ve y disfruta el festival, es motivo de celebración!” Saiken no pudo evitar dar una pequeña sonrisa.
“¡Es el colmo!” Keno ya estaba colorado de la furia. “¡Y fuera de eso te atreves a reírte de mí en mi cara!”
“Keno, no creo que vayamos a lograr nada, será mejor que nos vayamos, ya podremos pelear contra ellos e…” No completo su frase ante semejante mirada de pistola que le clavó, los ojos casi en blanco por la inmensa furia.
Una chica de Primero se acercó a la escena diciendo en voz preocupada. “Keno-san, Saiken-dono rechazó amablemente, no es razón para enojarse” mientras acercaba su mano hacia el hombro de Keno. No hubo oportunidad de contacto, Keno lanzo un puñetazo con el dorso de la mano gritando irritado “¡NO ME TOQUES, BASURA!” El golpe aturdió a la chica, lanzándola fácilmente dos metros lejos de la escena, proyectada para caer completamente horizontal contra el suelo.
Sin embargo, algo la detuvo.
El brazo de Saiken alrededor de su hombro contuvo el impacto y detuvo la caída en seco. Un movimiento rápido, parecía que hasta sabía que iba a pasar.
“Esto es conmigo, Keno. No metas a nadie en tus problemas, mucho menos a los novatos que sabes que son más débiles que tu.”
“¡CIERRA LA BOCA! YO PUEDO HACER LO QUE SE ME DE MI GANA CON LA VASOFIA DE ESTA ESCUELA. AHORA QUITATE DEL CAMINO, ESA NIÑA ES UN BUEN PROSPECTO PARA TU REEMPLAZO. HEH HEH.”
“¿estás amenazándome?” Saiken miraba al suelo, ocultando su expresión.
“Uh oh, le mando una amenaza” Seike ya tenía la mano en el rostro, a señal de frustración.
“Debería haber una forma menos predecible de provocarlo.” Blackrose señalaba, un poco más entusiasmado.
“de acuerdo, Keno. Pelearemos contra ti y tus chicos. Espero quedes satisfecho” Saiken dio una mirada determinada.
“¿Acaso crees que somos adornos tuyos para que nos mandes a pelear cuando gustes?” Blackrose sonaba un tanto enojado. “Tú eras quien quería pelear, ¿No?” Saiken lo miró igual de fulminante. Mirada a la que ni siquiera Blackrose le sostenía mucho tiempo.
“De acuerdo. Muchachos, ya vamos a pelear contra la pesca grande del colegio. Prepárense” Keno dirigió a sus compañeros.
“Seike, Blackrose, ¿Listos?” Saiken dirigía también
“No siempre listo, Preparado cuando quieras he he” Seike, dirigió con una sonrisa mientras colocaba su Kokoro en su brazalete.
“Preparado” Blackrose se limitó a decir…
Todos con los ojos atentos al centro. Ni un sonido se escucho por breves segundos mientras aquellos fulgores de transformación comenzaron a brillar….
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